Boka nu
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Bidra med feedbackLos pasteles están buenos, muy buenos. La calidad de todo es estupenda pero lo mejor de lo mejor son las empanadillas, un clásico del que no te cansas.
Llegamos quedando poco para cerrar pero nos atendieron muy amables. Yo tomé un cuerno de merengue y es de los mejores que he probado, suave, no demasiado dulce, esponjoso y con un toque de canela que le da un sabor delicioso. Al día siguiente pasabamos por una calle y habia un olor más que agradable, a la vuelta estaba el obrador de la pastelería, estaban cargando para llevar a la tienda. Tras comentar que olía estupendo, allí mismo en la calle, nos invitaron a unas madalenas. Más amabilidad no se puede pedir.
Esta confitería es una de las más antiguas de Melilla, ofrece deliciosas empanadillas y pasteles de carne, así como unos dulces excelentes.
Todo un clásico de las confiterías melillenses. Sus empanadillas son famosas en toda España, y mucha gente me las pide cuando voy a viajar. También hay que hacer especial mención a las palmeras de chocolate y los tocinos de cielo. Una confitería tradicional, que perdura y merece la pena visitar.
Muy ricas las palmeras de chocolate y el servicio muy atento y muy bien todo.