Boka nu
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Bidra med feedbackSitio encantador,buen ambiente y buen servicio.La comida desde el pan,los platos,el postre hasta el café, todo perfecto y riquísimo!!! Sin duda volveremos!!!
Lugar con encanto, precioso, comida buenísima todo casero y delicioso, vino muy rico nos llevamos unas botellas. Trato excelente. Volveremos pronto.
Pequeño comedor para una cocina y platos exquisitos. Comimos unas alcachofas, por recomendación de los anteriores comensales, que estaban excelentes, y luego un buen chuletón! El servicio y la atención, super agradable, y para acabar, nos invitaron a visitar su bodega.
Estuvimos cenando en la sala de la bodega, con dos niños de 9 y 12 años, el 26 de diciembre. El ambiente nos embriagó casi tanto como el excelente vino que nos recomendaron. El servicio estuvo atentísimo en todo momento. Tomamos pencas, chistorra, patatas a la riojana y chuletillas. Todo excelente. Tranquilo y refinado.
En un pueblo con un encanto extraordinario en sus calles amuralladas. Lo que nos gustó son las bodegas que hay formadas bajo el suelo. Por la calidad del suelo, esos túneles son propicios para la fabricación del vino. Hemos venido aquí para conocer el proceso de elaboración del vino y a comer y la experiencia ha sido insuperable. Raquel empezó la visita en la bodega y Chus (Jesús) fue la culminación con la cata. El restaurante el servicio y la comida son inmejorables: Patatas a la riojana. Tomates con queso (esos tomates que te transportan a cuando eras niño, que saben a tomate). Pisto de verduras inmejorable. Carne cortada a tiras y marcado a la piedra para acabar de hacerlo a tu gusto. De postre (caseros) tartas de queso y torrija… sin palabras. La vuelta, cata y menú son 48 euros. Espectacular precio por la cantidad, la calidad y el servicio. Volveremos