El Chaparral - Chipiona

Después de esperar más de treinta minutos sentados y de avisar al camarero en dos ocasiones, el camarero sale y se va a atender a otras mesas que acababan de llegar. Le avisamos y le decimos "oye perdona, pero nos toca a nosotros". Sin embargo, este chico levanta las manos y dice en voz alta "tranquila, yo no tengo ningún interés aquí". Le digo que no estoy nerviosa, que llevo más de treinta minutos esperando y que le he avisado en dos ocasiones, a lo que él responde que no se preocupe que nos vamos y nos dice "hasta mañana". Este chico responde sin mirarnos "mañana cuando vengáis estará cerrado". Además de esperar más de treinta minutos para pedir un café cuando solo había un cliente en el bar, una falta de educación increíble.

En este restaurante se pueden disfrutar platos típicos de la región y recibir un buen servicio. Es recomendable ir a comer temprano, a las 13:30 o después de las 16:00, ya que suele haber mucha gente al mediodía debido a su ubicación en el paseo de la playa.

Estuvimos en este restaurante porque todos los demás estaban llenos, y salimos cansados, con mucho trajín. La camarera era inexperta y el camarero era prepotente. Pedimos macarrones para los niños y se notaba que la pasta estaba pasada, no cocida en el día, y estaba pegajosa. Las sardinas estaban crudas, el arroz estaba pasado y nada cremoso. Nuestra sorpresa fue al ir al baño y ver la cocina, lo que vimos no nos gustó en absoluto. La cocinera se estaba rascando las axilas, con tirantes y sin guantes, sudando y no muy limpia. Por supuesto lo hemos denunciado a sanidad. No lo recomendamos en absoluto, especialmente en estos tiempos donde la higiene debe ser prioridad.

Fuimos a este lugar porque estaba al lado de nuestro puesto en la playa y por no mover el coche de nuevo tras lo que costó aparcar en pleno día de la Virgen de Regla. La comida estuvo correcta sin más, las sardinas se agotaron justo antes de pedirlas nosotros (no es culpa suya) y otro plato que pedimos nunca llegó y tuvimos que cancelarlo. Las camareras tuvieron buen trato pero un camarero que había nos amenazó con quitarnos la mesa mientras esperábamos a que nuestras parejas llegaran de la playa. Se llena porque se llenan también todos los demás cercanos y están en el mismo paseo marítimo pero no tiene una calidad excepcional. Pedimos para comer y beber (sin postre) para 4 adultos y una niña y nos salió por unos 36€ (quitando el plato que pedimos y no nos trajeron). No creo que repita, hay otros muchos lugares en Chipiona.

Estuve con mi familia el día 9 , para almorzar, y fue pésimo. Pedimos un menú para los niños y no había, entonces pedimos nuggets con patatas, nosotros pedimos entre otras cosas ensaladilla rusa y dos bocadillos serranitos. Después de 15 minutos esperando pasa el camarero y nos dice no hay ensaladilla rusa y se va sin esperar a que pidamos otra cosa.a los diez minutos vuelve a venir y nos dice que no hay nuggets, entonces tuvimos que pedir salchichas y croquetas.y le dijimos lo que queríamos sustituir por la ensaladilla rusa.trae algunos platos de lo que pedimos sin pan y sin cubiertos, entonces me levanto y se lo pido y me dice que no tiene pan ,solo piquitos.nos ponen los serranitos y son pequeños y le preguntamos si esos eran los bocadillos y nos dice que son montaditos, le decimos que hemos pedido bocadillos y nos dice que no tienen pan para bocadillos. Ya sí me enfadé, creo que aguanté demasiado, y encima el camarero se enfada y dice que no es para tanto, que él no ha matado a nadie.Ah, decir que nos rebajó la cuenta 4,60 euros, jajaja, una fortuna.