Ciento 2 - Benicàssim

Una casa de pueblo en la parte antigua de Benicassim, con dos plantas y mobiliario variopinto, así como la decoración de las mesas. Que con una factura como esa tuviera salvamanteles de papel es algo que no me hace demasiada gracia. Hay una pequeña barra para tomar algo y esperar a ser sentado en la puerta, y una pizarra con lo que hay ese día, como cigalas a nueve euros la unidad, o gamba roja a ocho. La materia prima es buena, y la preparación de los platos está bien, pero hubo unanimidad en que el San Pedro que casi todos pedimos de segundo, no era para tirar cohetes. El revuelto de huevos de oca que traen de Segovia, está bien para probar y compartir. Es un restaurante sin menú, muy valorado en la zona, donde la cartera hay que tenerla preparada si no se va con tiento.

Cada vez que vengo me sorprende positivamente, la carta siempre dependiendo del producto de temporada, el servicio excelente como la comida y el sitio, a mi me parece precioso, Alejandra Manolo y su equipo lo bordan, un 10 Meal type: Dinner

Excelente comida, elaboración, atención y mucho sabor.... Y con muchas opciones sin gluten.... Gracias por pensar en los celiacos!!!!! Price per person: €50–60 Food: 5 Service: 5 Atmosphere: 5 Recommended dishes: Patatas Bravas, Carabinero Con Huevo Frito Con Patatas, Churros Rellenos de Nutella Con Helado de Vainilla, Ensaladilla Rusa de Gambas, Tarta de Queso

La comida buena, pero desorbitado el precio Food: 4 Service: 2 Atmosphere: 3

Buena comida, algo subida de precio, incluso cara, aunque buen producto. PERO al terminar la comida se nos acercó el dueño (o encargado) a recriminarnos educadamente que nuestra hija no había consumido y que él estaba ahí para facturar. Nos dijo que le habíamos dado incluso un yogur (añado que le dimos además dos lonchas de pavo, culpable). Al hacer la reserva se lo indicamos (se ve que no nos entendimos, a veces ocurre) pero aún así no sé en que hubiera cambiado. ¿Nos hubiera dicho que no nos cogía la reserva? Quizás nos hubiera colocado en una mesa aún más pequeña (en la que estábamos tres adultos tampoco es que hubieran estado amplios precisamente). Aclaro que mi hija tiene 5 años recién cumplidos, que nos cobraron su pan y su servicio (y me parece incluso bien), que le pedimos unas croquetas y que el ticket fueron 120 euros. Un detalle muy feo.