Mediamanga - Barcelona

No diría hermano pequeño del aclamado Montbar, sencillamente diría hermano. Siguiendo estilos muy parecidos, crean su propuesta con personalidad propia. No puedes comparar, son conceptos distintos que se asemejan en algunas maneras de hacer. La propuesta gastronómica es muy divertida y ofrecen un genero excepcional. Hay que pedir sin miedo, las raciones son ligeras. La bodega, igualmente divertida, ofrece grandes y exclusivas referencias. El personal es extremadamente atento y profesional y sabe mantener el trato cercano con los clientes. El local es muy agradable pero tampoco es el punto fuerte del restaurante. Si tuviera que hacer alguna petición (a estos niveles es muy difícil exigir algo), ofrecer algún tipo de cerveza más. Merece la pena una y otra vez.

¡Me encantó! El sitio es bonito y acogedor, con la cocina abierta y pegada a las mesas. La comida riquísima. Destacaría las navajas, kokotxas y pizza atún. La sumiller fue encantadora y nos recomendó un vino catalán muy rico aunque algo caro, pero... Gracias.

Lo que más nos gustó fue el arroz con gambas y la torrija! Cena dos personas sin vino 160€

De esos restaurantes cuyos platos te emocionan. Es como un viaje inmersivo a lo delicioso de la gastronomía. Los snacks están sublimes y el resto formidable. La única pega del restaurante es el servicio de camareros, todos/as con buena voluntad pero una notable falta de conocimiento.

Espectacular gracias Laia, de parte de Willy, y Sam, por tu servicio, atencion y carisma, espectacular, de verdad!