Venta De Aires - Toledo

Nos encantó, el restaurante es hermoso y la terraza una maravilla, una decoración conservada hasta el mínimo detalle. la comida era muy buena también y el servicio muy amable. Tuvimos mucha suerte de reservar en el último momento y tener una mesa libre porque estaba desbordando a la gente. todavía una experiencia muy agradable. la situación está en las afueras del centro histórico de toledo pero a un paso, y vale la pena, también, como un curioso hecho Joto adelante tiene un circo romano del tiempo que da aún más encanto al enclave.

Gran oportunidad para saborear la comida tradicional toledo en un restaurante con tanta historia (aproximadamente 130 años de historia hoy), en el que sorprende la aparición de personajes tan dispares. el lugar es hermoso, parece rústico y moderno al mismo tiempo. el personal es impecable tanto en apariencia como en formas, muy agradable y cordial en todo momento. los platos que pude probar fueron muy buenos resaltando el cromo casero de pera (creo que podría mejorar un poco su presentación al precio que es) y el muelle de salmón. Ser una cocina tradicional con toques contemporáneos no me sorprendió en probar nuevos platos o sabores, sin embargo, para mí no fue una molestia y lo recomiendo totalmente.

Un lugar muy agradable con diferentes espacios. Comimos allí dos veces, la primera ordenamos el menú con cocina. Todo era muy rico y no pudimos comer todo lo que pusieron, porque las raciones son muy abundantes. En el segundo, pedimos algo que no estaba en la carta de la cena, pero no pusieron pegamento. esencial para probar el golpe de mazapan. importante: abierto para comidas y cenas Lunes y Martes lo que no es muy común en el toledo.

Muy buena experiencia. todo es cuidadoso en detalle. el lugar es hermoso y muy acogedor. excelente atención, calidad y comida exquisita. No puedo ponerles ningún palo. Lo único que sentí fue la cantidad de comida que volvió de otras mesas, no porque no sea bueno por supuesto, sino por la cantidad, es difícil terminar un plato. Se lo recomendaré un cien por ciento a cualquiera que vaya por un látigo.

El restaurante está en las afueras de Toledo, pero se puede llegar caminando sin problema. Se trata de un emplazamiento ideal para realizar comidas en grupos numerosos, así como convites. La terraza interior es tremendamente agradable y muy recomendable para comidas o cenas románticas. Por último, la comida está a un nivel muy elevado, pero cuidado porque si sois pocos los platos son abundantes. Para 2 comensales es suficiente con 1 entrante y un segundo cada uno. Eso siempre que la intención sea llegar al postre y alargar un poco la sobremesa. Os lo recomiendo si vais a visitar Toledo.